Cuando vemos una rosa lo primero que miramos es el color de sus pétalos, la forma y la delicadeza con la que están colocados cada uno de ellos ,el aroma que desprende y lo que ese olor significa para nosotros. No nos percatamos de sus espinas hasta que nos pinchan, y duele, duele mucho, sangras y mientras curas la herida, te juras a ti mismo que la próxima vez tendrás más cuidado...
Es la vida la que se ríe de nosotros, es ella la que juega, la que hiere y la que alegra, nosotros decidimos que camino tomar pero no elegimos lo que ese camino nos deparara...la tristeza nos nubla la mente, cuando la herida sangra el mundo se nos viene encima pero siempre habrá sitio para el olvido... siempre habrá un nuevo camino, con una nueva experiencia... siempre habrá una nueva rosa a la que mirar.
Te amo.